El Perdón de la Casería – San Fernando

Bueno pues ya estamos en el Jueves Santo, En este día también salen tres Procesiones, que son: El Cristo del Perdón, o “la de la Casería”, como también la llaman, La Misericordia, de La Pastora y la del “Silencio”, de la Iglesia de San Francisco.

El Cristo del PERDÓN

Como siempre voy a comenzar en ese mismo orden y por tanto empezaré por la que le toca salir antes, como es la Cofradía de Penitencia del Santísimo Cristo del Perdón y nuestra Señora de la Paz, que sale a las 16,30 horas de la Parroquia de la Inmaculada, de la Casería de Ossio.

Con bastante antelación, a la hora de salida, las miles de personas que allí, en esa pequeña plaza, se congregan, para no perderse el mayor espectáculo ritual de la Semana Santa isleña, ven como lo primero que ocurre, es la llegada del paso vacío, portado por los de la JCC, quienes lo traen desde el almacén y lo dejan delante de la puerta, un poco hacia atrás para permitir el pasar de los componentes del cortejo procesional.

Por lo que a las 16,30 en punto, sale la Cruz de Guía, y detrás empiezan a desfilar las primeras secciones de penitentes cuyas túnicas son negras de cola con capirote negro y un cordón blanco con tres nudos, que simbolizan los tres clavos de Cristo, a modo de cíngulo. Hay que destacar que los hermanos de filas siempre, desde su fundación, han portado una cruz de madera pintada en negro, con el escudo de la hermandad en la cruceta, en lugar de cirios. Los Jefes de Sección también la llevaban mucho más largas a
modo de pértigas.

Hoy día, y desde el año pasado, todos los componentes de la Junta de gobierno y todos los hermanos de filas, dejan de llevar las cruces y habiéndose cambiado las reglas de los estatutos, ahora portan pértigas los de la Junta y cirios los de filas, excepto la última sección que llevan cruz para que no se pierda esa tradición.

Llegará el día que una Junta se pregunte por qué esos llevan cruces, y no cirios y terminarán todos con cirios….

Dicho esto, empiezo a hablar de lo que ocurre delante de la puerta del templo, y que es lo que yo llamo “Espectáculo ritual”. Consiste en que una vez llegado el paso, se comienza por sacar una cuña del monte, por donde corre una guía que es para pasar por ella la punta inferior de la cruz, previamente se han desmontado las luminarias de la cola del paso, y a continuación sale portado a hombros de cinco hermanos, o de los cargadores, el impresionante crucifijo con el Cristo del Perdón que una vez situada la cruz en la guía del paso, primero se introduce el extremo inferior y se sostiene mientras dos hombres introducen los brazos de la cruz en unos aros sujetos a unas barras con las que se va empujando la cruz hacia arriba hasta quedar en posición vertical, momento en que suenan los aplausos del público y la banda de cornetas y tambores tocan el himno nacional, a continuación se le ponen en sus alojamientos las luces de candelabros de cola y ya cuando estén listos los de abajo se dan los toques para la primera levantá o trepá.

Lo aquí narrado no tiene ni punto de comparación con el momento de tensión que se vive estando allí presente, pues parece que se está presenciando el momento de la crucifixión de Cristo. Este es el momento cumbre de esta procesión, pues aunque tiene muchos más en su largo recorrido hacia la Carrera Oficial pero es este de la puesta de la cruz en el monte de claveles rojos del paso, el que nadie debe perderse.

Aunque esto que acabo de contar no lo saben todavía mucha gente, “afortunadamente”, y digo afortunadamente, porque si todos los que llenan la plaza de la iglesia para ver salir el Nazareno, fueran a presenciar este espectáculo ritual de la crucifixión en la Casería, se crearía un verdadero problema, puesto que ya se está empezando a notar cada vez más gente, que dejan el coche en la glorieta o en San Carlos, o en el barrio del Cristo para ir andando a la Casería, ya que está cortada la circulación, por que si no sería un verdadero caos.

Debo hacer constar, que todo lo anteriormente narrado sobre el “espectáculo ritual” ha sido así hasta el año pasado de 2008, pues este año 2009, todo el que haya ido a presenciarlo, se habrá llevado la sorpresa de que esto no era así, y no por que yo mienta, sino porque este año se ha abierto una gran puerta en el lateral de la iglesia, que permite ya la salida del paso del Perdón ya con la cruz montada en su sitio. Dicen que también servirá para la futura salida del paso de la Virgen Ntra. Sra. de La Paz..

A todo esto la procesión continúa su lento caminar hacia el camino de la Cruz para pasar por el puente de piedra… ah no, que ese ya no existe, bueno por el nuevo puente de hormigón, pero que tampoco pasa ya este año por el camino de la cruz porque esto también ha sido modificado. El caso es que la cruz de guía este año enfilará, con todo, la calle San José y San Antonio, de allí se dirigirá a la calle Patrona para ya por el barrio del Cristo y por la calle de San Ignacio dirigirse hacia Colón-Constructora Naval, por delante de las monjas de clausura… ya saben … otro momento que no deben perderse.Penitente de fila, de la última Sección, portando una cruz en vez de cirio.

La imponente cruz del Perdón sale a manos alzadas de la parroquia para ser situada en el paso:

el perdon en brazo de los cargadores

Imágenes de los titulares de la Hermandad del Perdón

Hay que observar que Antonio Bey supo plasmar en la figura del Crucificado lo que parece más normal que todos los demás crucificados, y es que se hace notar que a Jesús de Nazaret, lo clavaron por las muñecas y no por las palmas de las manos, que es un error muy común en casi todos los escultores.

El Cristo de la Sangre de la Hermandad de los Desamparados, también fue hecho con los clavos en las muñecas, por Alfonso Barraquero.

La figura de la Virgen Nuestra Sra. de la Paz, aunque es cotitular del Perdón, no procesiona, solo recibe cultos en su altar, de la Iglesia, y es una lástima pues debería hacerlo ya que es una preciosa escultura.

virgen de la Paz, Hermandad de El Perdón

Esta bella imagen se queda “dentro” y no sale a acompañar a su hijo en la cruz, una lástima.

La historia de esta joven hermandad, es tan corta como interesante, pues resulta que allá por los años de 1953 un grupo de Personas, entre las que había militares de la Marina de Guerra, decidieron junto con el entonces párroco de la Iglesia de la Inmaculada, de la Casería de Ossio, Don Melitón Sáinz, fundar en esa parroquia una cofradía. Cofradía que sería en torno a la figura de un Jesús crucificado, a la que pondrían por nombre de El Cristo de los Navegantes, y saldría en procesión por las calles de la feligresía en la tarde del Viernes Santo, y durante el recorrido se rezarían las 14 estaciones de la Pasión, marcadas por cruces de madera, en el itinerario, en unas casas a equidistancias suficiente para ir de una a otras y parar el cortejo.

Como esta procesión sería de vía crucis de penitencia, todos los hermanos llevarían cruces de madera en lugar de cirios, siendo los faroles de separación de Secciones, la única iluminación que llevarían a excepción de los cuatro hachones que llevaría el paso.

Sin embargo esta idea no prosperaría, en cuanto al nombre de la Cofradía se refiere, porque al año siguiente ya saldría con el titulo de Cofradía de Penitencia del Cristo del Perdón, respetándose, eso sí, la forma de ir rezando las estaciones, y todo lo demás, bueno se cambió al Jueves Santo, en lugar del Viernes, como acompañamiento musical se dictaminó un par de tambores con sonido destemplado, que marcaría el paso de los cargadores.

Ya solo queda hablar de la talla del Cristo, que fue encargada al entonces joven escultor isleño Antonio Bey Olvera que la realizó en tan solo ocho meses y con ella y con un paso prestado por la Hermandad de La Oración en el Huerto, ya pudo salir, el precio que cobró Bey por el trabajo realizado fue de diez mil pesetas.

La talla del Cristo del Perdón representa el momento en que Cristo en la cruz dice la primera de las siete palabras la “Padre mío, perdónalos, porque no saben lo que hacen”, cuyo lema es el de la Cofradía desde el inicio hasta la actualidad.

Cristo de El Perdón
El Perdón del cañaílla Antonio Bey. Año 2006.- Fotografía www.elguichidecarlos.com

Esta talla, según el concepto de hombre fuerte y de complexión atlética que tenia el escultor, del cuerpo de Jesucristo, fue realizada a un tamaño y forma descomunal y enorme, mostrando sus musculaturas de hombre bien fornido, entonces el pueblo llano que es sabio y ve el detalle demasiado exagerado de las masas musculares, lo comparó con el de un afamado futbolista de cuya complexión atlética, se le parecía mucho, y lo llamó cariñosamente “Kubala”, que era el nombre con el que se conocía a ese futbolista, desde entonces se la viene llamando así sobre todo por las personas más mayores, (las que conocieron al futbolista).

Desde sus inicios en el devenir de los tiempos, la Hermandad del Perdón siempre salió de su templo a las 20,00 horas, debido a que era esta la única cofradía que no pasaba por la Carrera Oficial (que estaba entonces en la Calle Rosario) y porque nunca sobrepasó los límites de su feligresía hasta que en años posteriores fue acercándose a la calle Ancha.

Entonces sucedía un acto muy emotivo, y era que al pasar por la glorieta (Paseo del General Lobo) donde había una de las cruces que marcaban estación de penitencia, en el monumento al Corazón de Jesús, toda la comitiva, entraba en el paseo, dirección al dicho monumento y se rezaba allí una de las dichas Estaciones de la Pasión, por lo visto la cofradía quiso ese día, rendir homenaje al escultor Antonio Bey, que también realizó el escultural monumento del Sagrado Corazón de Jesús, luego salían en dirección de la calle San Rafael hasta la c/ Ancha, para seguir por Calatrava, San Ignacio, Ruiz Marcet hasta la esquina de “Ruceco”, (C/ San José y San Antonio) donde la esperaban sus fieles seguidores para acompañar a su Cristo del Perdón hasta la recogida en su templo.

El Perdón en la Glorieta, años 50 – 60

El perdon en la Glorieta
Dos imágenes de Antonio Bey. Sagrado Corazón y Cristo del Perdon en la Glorieta. Fotografía cedida por José Leiva.

La talla de la Virgen cotitular del Perdón; Nuestra Señora de la Paz, es del escultor Juan González Ventura, y es una magnífica obra de arte, que por no sé qué circunstancias, lleva ya muchos años en su altar de cultos, y como mucho la han sacado en vía crucis o en Rosario de Aurora.

Esta lastimosa y dolorosa imagen, siempre se queda dentro, y menos mal que no cierran a la salida del Perdón, enseguida las puertas del templo, porque todo el personal que se encuentra en la Plaza de San Juan, entra a visitarla.

Para El Güichi de Carlos
Ligeros apuntes de nuestra Semana Santa.
La Semana Santa vista desde la acera
José Luís Leiva
Abril 2009